La subestación eléctrica es el corazón de un sistema eléctrico, ya que es el lugar donde se transforma y distribuye la energía eléctrica a través de las líneas de transmisión y distribución. Sin embargo, el monitoreo y el mantenimiento de una subestación pueden ser desafiantes debido a la complejidad de los sistemas y la necesidad de proteger los activos críticos.